Bienvenido a mi mente forastero!

Mis Blurbs hoy sintieron ganas de hacerse conocer asi que cree este blog para que encontraran nuevos amigos. Sus pensamientos y su gran imaginación se ven a través de lo escrito y me invitan a este pequeño mundo del cual soy un visitante de paso, al igual que ustedes.

jueves, 20 de agosto de 2009

La Rutina del Amor

Cuando uno necesita despejar la mente, no hay mejor manera que hacerlo durante una larga caminata. O al menos eso creo yo. Esta vez mi travesía se vio interferida por el hecho de que ocho lecturas me esperaban pacientemente en mi escritorio, con una nota: “leer para el control de lectura del lunes”. Era viernes. Sin embargo, no dejándome sucumbir ante la presión, me arme de valentía y sali a caminar buscando una banca donde estacionarme y comenzar a leer.

Me encontraba en un parque Miraflorino con una lectura en mano y resaltador en la otra, cuando tratando de disimular mi desinterés acerca de porque se habla del Perú como una “república sin cuidadanos”, no pude evitar ver pasar a una pareja de “adultos mayores” (si ese es el eufemismo correcto) que pasaban a mi lado.
Caminaban de la mano, ella mirando el mar y el prestando gran atención a dos niños que jugaban con sus York Shire Terriers o sus snourses miniaturas (porque ahora cuanto más chico sea el perro, mayor aire de grandeza puede tener su dueño). Su caminar no era lento, sino más bien pausado, como sabiendo su destino pero tratando de evitarlo, o hacer del paseo, uno inolvidable. Los protagonistas de mi historia, (a quienes decidí llamarlos Ignacio y Rosario) tomaron un merecido descanso en la banca de al lado. Fue cuando el encanto de esta pareja se desvaneció. No hablaron durante todo el tiempo que estuvieron sentados y cada uno miraba hacia un lado distinto. Parecía que en los años que llevaban casado todo lo necesario ya se había dicho y sin pensarlo ambos convirtieron sus vidas en una rutina. Pero al menos se tenían el uno al otro.

Los paseos diarios que les recomendó el doctor, además de brindarles una mejor salud; les recordaba que afuera aun existía un mundo que cambiaba constantemente. Los frutos de una nueva generación se encontraban jugando futbol o besándose bajo un árbol como también ellos lo hicieron de jóvenes. Se dieron cuenta (o tal vez solo fui yo al ver sus expresiones) que ambos eran solo espectadores de una función que estaba llegando a su fin. ¿Tendrían alguien que los recordara? ¿O era suficiente el amor que al pasar de los años tal vez seguía calentándolos en las frías noches de la capital? Termine de entender que su silencio era otra forma de comunicarse; que probablemente ya no necesitaran de palabras para expresarse. Todo lo que vivía uno, lo sentía el otro.
Una fuerte brisa nos agarro de golpe y mi descuido hacia mi próximo examen se hizo evidente cuando salieron mis hojas enrumbadas hacia mejor vida. A regañadientes, me agache y empecé a recogerlas, me sorprendió ver a Ignacio agacharse para recoger la ultima.

-“¿Estudiando?”
- “desafortunadamente” llegue a responder.

Su risa fue sincera, y me trajo una sonrisa a la cara. Me despedí de mis nuevos viejos amigos al mismo tiempo que la tarde se despidió de nosotros.

Esa misma noche llegue de sorpresa a la casa de mi abuela. Estaba metida en la cama con la bolsa de agua caliente en los pies. Le pedí que me contara una vez más como conoció al abuelo, sus ojos azules se iluminaron. Esa noche tuve el mejor de los sueños: me encontré sentada en la misma banca, aunque esta vez no era joven. Todo era diferente, y por primera vez me gusto lo que veía.

2 comentarios:

  1. Me likey Isidora. Deberías postear lo que me leiste hace un par de semanas, estaba muy bueno.

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  2. isidora, dile a los blurbs q escriben bien paja! mis felicitaciones a ellos y a ti por las transcripciones.

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